lunes, 25 de marzo de 2013

Carlos González: "A los niños se les malcría cuando no se les hace caso"

Entre los papás, ser del doctor Carlos González (Zaragoza, 1960) o ser del doctor Estivill, o sea ser partidario de “Bésame mucho” o de “Duérmete niño” se ha convertido en algo así como ser del Barça o del Madrid. ¿Son tan opuestos, en realidad, sus postulados?, ¿le molesta la insistencia en esa comparación o cree que es positiva porque fomenta el debate?

Pues sí, me temo que nuestros postulados son completamente opuestos. Yo afirmo que los niños pequeños no se despiertan por la noche porque están enfermos o malcriados, sino que es normal; que no nos llaman para fastidiar, sino porque nos necesitan, y que no es ético negarles nuestra atención y nuestro contacto.



Carlos González Bésame Mucho
Doctor Carlos González, autor de "Bésame mucho".

¿Es imposible malcriar a un niño por hacerle mucho caso?

Sí, es imposible. A los niños habitualmente se les malcría cuando no se les hace caso. Cuando les compramos muchos juguetes para que nos dejen en paz y poder ver nosotros el partido por la tele. Cuando preferimos comprarles un montón de caramelos antes que dedicar el tiempo necesario a explicarles que no es bueno comer tantos caramelos.

Si el niño llora, ¿hay que levantarse y cogerlo en brazos o lo dejamos llorar para que se le pase?

Si encuentro a un familiar que llora, o a un amigo, o a un compañero de trabajo, no se me pasará por la cabeza pasar de ellos. Les preguntaré qué les pasa, les haré compañía, les prestaré apoyo, intentaré ayudarle. Lo mismo haré con mis hijos, y con más motivo, porque son más desvalidos y porque es mi responsabilidad. Trataré a mis hijos como a seres humanos, sencillamente.

Y si no quiere comer, ¿qué hacemos?

Pues lo mismo que si es un adulto el que no quiere comer: si hace mala cara, preguntarle si le duele algo. Si está contento y feliz, pues respetar que no tiene hambre. Jamás se me ocurriría obligar a comer a un adulto que no tiene hambre.

Considerado uno de los máximos referentes de la crianza con apego, supongo que le resultará sencillo definirnos en qué consiste la crianza con apego.

Pues no. La verdad es que yo nunca he usado esa expresión. Supongo que la mayor parte de los que la usan se refieren al hecho de no tener miedo a coger al niño en brazos, consolarle cuando llora y atender sus necesidades.

¿Qué es lo contrario a la crianza con apego?

¿Con desapego?

Usted habla de que los padres deben perder el miedo a malcriar a sus hijos... ¿Dónde está el límite?, ¿no existe peligro de ser demasiado permisivo?

¿Qué es ser permisivo? Si mi hijo quiere estudiar mucho y hacer los deberes, ¿se lo debo impedir? ¿Debo permitir que "se salga con la suya" y estudie todo lo que quiera? Y si quiere comer sólo comida sana, ¿debo ponerme firme y hacer que coma de todo, incluyendo chuches y porquerías? Y si lo que le gusta a mi hijo es leer libros, ¿puedo permitírselo, o es importante que también vea la tele, sobre todo los programas de famoseo?

Evidentemente no voy a permitir que mis hijos hagan cosas malas, que peguen a otros niños, que quemen la casa, que destrocen libros, que defrauden a hacienda, que se droguen... como ninguno de mis hijos ha intentado jamás hacer esas cosas, no me he visto en la necesidad de prohibírselo. Pero eso no significa que sea permisivo.

¿Por qué usted no es partidario de las guarderías?

No es que no sea partidario de las guarderías, es que soy partidario de los padres. Creo que como mejor está un niño pequeño es con sus padres. Y la mayoría de los niños pequeños están de acuerdo conmigo: prefieren estar con sus padres a estar con otras personas. Creo que los poderes públicos deben proteger el derecho de los niños a estar con sus padres.

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